Este proyecto consistió en la construcción de un techo de concreto armado sobre una azotea destinada a lavandería y futura ampliación, asegurando resistencia estructural y durabilidad frente a las condiciones climáticas.
El trabajo se realizó en una vivienda de difícil acceso, por lo que la subida de materiales y equipos se planificó cuidadosamente. A pesar de los retos logísticos, se logró un vaciado exitoso, obteniendo una losa sólida, segura y lista para futuras construcciones o acabados.